Las 42 habitaciones del Hotel Rigel del Lido de Venecia son únicas por su selecto mobiliario y los ambientes que impregnan sus paredes. Están inspiradas en diferentes temas fascinantes relacionados con un periodo histórico, con lugares del mundo o con alguna celebridad.
Dotadas de todas las comodidades modernas: caja fuerte, TV satelital, aire acondicionado; las habitaciones del Hotel Rigel ofrecen una estancia exclusiva a unos minutos de Venecia, en ambientes cuidados y relajantes, con un agradable toque vintage que las hace irresistibles y les añade singularidad y calidez.
Las habitaciones están disponibles en diferentes tipos: individuales y dobles, con posibilidad de cama extra, ideales para aquellos que viajan con la familia.
Nuestras habitaciones
Las líneas, las decoraciones y los muebles que caracterizan esta habitación se inspiran en los de las casas de la nobleza veneciana en los tiempos de Casanova, el amante más famoso de todos los tiempos.
Los colores en tono pastel, los dorados y los tejidos elegantes crean un ambiente de intimidad y confort que hará que se sientan como en un cuento de otros tiempos donde la elegancia y el hecho de haber cuidado el más mínimo detalle contribuirán a que sea más mágica su estancia.
Los tonos oscuros de la madera encerada, las líneas elegantes y esenciales de la cama y del mobiliario típicos del siglo XV fiorentino que la decoran y por último las fantasías floreales y los colores de los tejidos que la embellecen, reproducen la elegancia y retoman la armonía de las habitaciones que albergaron a algunas de las mentes artísticas y científicas, como la de Miguel Ángel, Leonardo da Vinci, Botticelli, Brunelleschi o Leon Battista Alberti que contribuyeron a sacar a Europa de las sombras de la Edad Media.
El rojo escarlata, los arabescos que decoran las tapicerías, las molduras multicolor del mobiliario lacado en blanco inspira el nombre de esta habitación que retoman la atmósfera y los colores de algunos ambientes palaciegos de la Roma papal.
Los enrevesados tallados de madera y los lacados polícromos con festones de flores que embellecen el cabecero de la cama, además de las dos mesitas de noche consiguen transportar a los huéspedes a aquel contexto y a aquellas salas en las que se exhibió Maria Malibran (1808-1836), una de las cantantes líricas más importantes de todos los tiempos y a la que se ha dedicado uno de los dos teatros líricos de Venecia.
Esta habitación es una de las más románticas del hotel por las curvas de las líneas y el color pastel de las decoraciones, además del maravilloso baldaquino que le confiere un toque especial al ambiente. De este modo, les acogerá en su reservado encanto y en la discreta tranquilidad que son una de las peculiaridades del hotel. Se trata de la habitación que normalmente el hotel reserva para las parejas en viaje de luna de miel o bien para las parejas de enamorados que desean transcurrir alguna noche en la ciudad de la belleza y el amor.
Esta habitación está amueblada con el típico mobiliario de estilo veneciano que retoma el lujo y la elegancia de la Venecia a caballo entre el siglo XVII y el siglo XVIII cuando la ciudad, en su momento de máximo esplendor, albergaba pintores como Canaletto o Guardi y músicos como Vivaldi o Benedetto Marcello. Con sus trazados barrocos y su decoración de lacados, se convierte en la habitación que mejor representa el espíritu y el gusto de la Venecia que se ha representado en numerosas ocasiones en los libros , cuadros o en las películas de cualquier época.
El color dorado y los motivos elegantes de sus tapicerías, una lámpara preciosa de cristal de Murano y los trazados y colores de las molduras del cabecero y del mobiliario recuerdan la escenografía de una de las numerosas películas románticas que se representaron en ocasión de Festival de Cine más antiguo del mundo y que todavía en la actualidad sigue celebrándose cada año durante el mes de septiembre en nuestra isla.
Es, sin lugar a dudas, la habitación más exótica de que disponemos ya que con su estilo tan peculiar evoca el gusto por la antigua civilización turca que a pesar de ser la principal antagonista de Venecia en política y en comercio, llegó a influenciarla en el arte y la cultura. Los arcos de carácter oriental evocan los del “Fondaco dei Turchi” sede principal en el siglo XVII y XIX de la República de Venecia donde tenían lugar los intercambios comerciales con los mercaderes de tierras turcas.
Esta maravillosa habitación, al igual que otras del hotel, retoma las líneas típicas del gusto del siglo XVIII pero exenta de los típicos colores y tonalidades de la Venecia de aquella época. Dentro de ella se recrea la austeridad y el gusto de la Italia de los Habsburgo que en lugar de tonalidades de color pastel prefería la esencia de la monocronía de la madera con el objetivo de ensalzar el minucioso trabajo de los tallistas y ebanistas de la época.